En la memoria de veneros de Luis Cid aparecen tres veneros en el Montón, aunque en el mapa su ubicación no es clara.
En la memoria de veneros de Mellada e Iznardi (1912) aparece la descripción de los veneros del Montón:
"Los mantos de tierras rojas pedregosas con cantos gruesos de cuarcita en esta parte inmediata a la sierra tiene pequeños espesores, pues entre la carretera, la vía férrea y la casa del Montón asoman varios islotillos de pizarras y grauvacas cambrianas. De estos mantos pedregosos nacen tres veneros. Las aguas del que brota por bajo de la casa y las de otro que hay en la alameda se reunen en una alcubilla, de donde se conducen por tubería de hierro a un gran pilar donde aforamos 48 litros.
A 400 metros al norte por el lado opuesto del arroyo se halla el otro venero que es el principal y en el que medimos hasta 260 litros que se recogen para el riego. Pero debemos advertir que los tres veneros son de régimen inconstante pues en verano se reduce mucho su caudal, como se comprende por los aforos de 1905 que hacen descender los promedios a la mitad para los dos primeros y en 153 para el principal, cifras probablemente todavía demasiado altas."
En el catastro de 1950 figura una alberca al sur de la Casa del Montón a la que le llega agua por una acequia que aún se puede observar en las fotografías aéreas, aunque abandonada
Más cerca de la casa hay otro pilar que sí está en uso. Ese no aparece en el catastro de 1950, pero si parece corresponderse con una fuente que aparece en el mapa militar de 1893.
