Fuente de la Barranca:

Descripción de Serafín Parra

  Bien marcada y con nombre propio en el Catastrón Nº 67 (hoja 2ª y última), Lo más destacable de esta fuente es su perfecto estado de conservación, los aparceros que hoy habitan la casa contigua a ella, la tienen, no limpia, sino radiante, el único cambio que se le puede apreciar desde aquel día en que la construyeron, es el caño que lo han sustituido por un grifo, me atendió la señora Paqui, que no vaciló en responderme a todo aquello que la curiosidad, me hacía preguntar, llevándome al sitio de donde se surtía, (el “barranco” que hay a la otra parte del arroyo de la Lancha), explicando los años de sequía, hasta qué punto bajó el caudal, al día de hoy enorme, un verdadero encanto, hasta el punto de recomendar, comenzar por la Barranca si alguien se decide visitarlas todas.

  Ella en sí no es de las más espectaculares, es el típico abrevadero, largo, de ladrillo con las esquinas matadas y poco más, sólo que el pilar que soporta el caño, da a pensar que pudiera ser el original de otra fuente que hubiera mucho más antigua.

 Acceso: En principio, como en el Catastrón indica hubo un camino, que partiendo de la carretera a Madrid y pasando por el cortijo de la Barranca, moría allí, hoy, tras destrozar la finca una urbanización, ha cambiado mucho, pero se entra por la misma carretera, ahora a un camino asfaltado, que a la derecha deja un vivero de árboles, que no hay que dejar hasta llegar a ella.