En la memoria de aguas de Luis Cid (1905) aparece el venero del Barranco de Rabanales. Esta es la descripción:

Barranco de Rabanales.

"Nace en terrenos de la finca denominada La Campiñuela Alta y es de importancia este manantial tanto por la cantidad como por su situación y proximidad a Córdoba. El caudal marcha a perder en su mayor parte, pues si bien está recogido por una presa antigua, esta se encuentra tan abandonada que represa solo una insignificancia. La cantidad utilizada riega unas cuatro fanegas de terreno en el Cortijo de Rabanales. El caudal lo componen varios brotes próximos, siendo el principal el que está situado casi enfrente de la zahurda de la Campiñuela. ".

Esta descripción más bien podría encajar con la Fuente de la Campiñuela pero Mellada e Iznardi (1912) la ubican de otra manera, que sí tendría que encajar aquí. Deben ser los mismos por la cifra de caudal que da de 1905.

Fontanar de la Rabanera

Es el manantial más copioso de la campiña de Córdoba y brota junto a la orilla derecha del Arroyo de Rabanales, a 160 metros al oeste de la casería de este nombre y próximamente otro tanto al N. del puente de la vía férrea de Madrid, precisamente en la línea de separación de las calizas toscas miocenas y de los mantos diluviales de acarreo, que por ambos lados del arroyo suben de 25 a 30 metros más altos. No se pudo aforar con exactitud por las muchas filtraciones que hay alrededor de la poza en que se recogen sus aguas y que lastimosamente no se aprovechan, pues solo sirven para abrevar el ganado en el verano, en los puntos bajos del arroyo. En 1905 se calculó su caudal en 230,8 litros y nosotros estimamos que actualmente es bastante mayor, no debiendo señalarse su promedio en menos de 250.

Descripción de Seafín Parra:

Fontanar de la Campiñuela:

  La Real Academia, define como fontanar a un manantial, y este en concreto que viene señalado en el Polígono, 66 (Hoja 3ª y última), lo forman no menos de cinco manantiales, el terreno hace un descenso hacia el río Rabanales, fruto de la erosión del mismo y en esta zona aparecen, casi a la misma altura o estrato unas islas de plantas hidrófilas, ojo, plantas que no árboles (escasísimos) es muy deducible que el acoso de los tractores, favorezcan esto, estas islas todas con la misma forma, resuman agua en cantidad, pero no la suficiente como para llegar de forma directa al arroyo, la porosidad , profundidad y la labor del terreno, hace que el agua se filtre antes de alcanzar el cause, pero a muy escasos metros, todo esto que describo, en unos quinientos metros escasos, en la rivera derecha, que forma un llano me imagino impracticable en invierno, entre lo que aporten los veneros y el agua de lluvia, esta zona se convertirá en un lodazal, inservible para la agricultura, pues con todo y eso, el terreno hoy se presenta labrado, de no ser así, podríamos estar hablando de un paisaje de ribera, con varias Hectáreas, de incalculable valor ecológico.

  Acceso: Podemos llegar por el descrito en (Fuente en Finca de Rabanales), pero por diversificar, explicaré otra posibilidad, Todos sabemos el tramo de vereda deslindada de la Alcaidía y que otros conocen por el camino de Rabanales a las Campiñuelas, pues ese es el que tenemos que tomar, pasamos el viaducto del AVE y ya podemos disfrutar del arroyo las Adelfas, seguimos adelante unos quinientos metros, hasta darnos con el arroyo Mortero, que tiene un chamizo a la derecha, por el margen de este arroyo hemos de tomar, notamos que  hace un giro a la derecha para desembocar en el Rabanales, pues siguiendo el cauce en su margen derecha podremos observar, en el talud que hace más adelante el terreno las islas de plantas hidrófilas